1 oct 2014

Reseña: Dulce seducción, de Jo Beberley






Titulo: Dulce seducción
Autora: Jo Beberley
Título original: A seduction in silk
Editorial: Titania
ISBN: 978-84-92916-63-4
Publicación: 30/06/2014
Encuadernación: Rústica con solapas
Formato: 150 x 225
Páginas: 448
Colección: Titania Época
Precio: 18€
Enlace de venta: Editorial Titania


SINOPSIS


Peregrine Perriam ha sido nombrado heredero de la propiedad de la familia, Perriam Manor, pero con dos condiciones: la primera es residir allí al menos treinta días al año.

Por irritante que eso le resulte al independiente Perry, la segunda condición es mucho más difícil: debe desposar a una completa desconocida, Claris Mallow, antes de que pase un mes; caso contrario, perderá la herencia. El problema es que Claris prefiere mil veces ser pobre que contraer matrimonio… con cualquiera. Y para defender su soltería es capaz de apuntar con una pistola a quien intente doblegar su voluntad. 

Como si eso fuera poco, a raíz de una antigua disputa, la tía de Claris ha pronunciado una maldición sobre la familia de Perry. Ahora, el joven debe hacer lo posible para seducir a Claris, convencerla de que acepte un matrimonio de conveniencia y, de paso, que anule la maldición… Lo que es aun más difícil cuando es ella la que tiene los mayores poderes de seducción. Nueva entrega de la serie de los Malloren. 

«Otra entrega deliciosamente entretenida y exquisitamente sensual». Booklist 
«Un nuevo triunfo de Jo Beverley». Affaire de Coeur


PERSONAJES


Perry: es el protagonista. Hijo menor del duque de Hernescroft, acaba de heredar una propiedad ansiada desde siempre por su padre, con la condición de vivir allí y casarse con Claris. Lo que empieza como un matrmonio de conveniencia se va convirtiendo en algo más real, pero sus asuntos en el almirantazgo le impiden llevar una vida plena junto a su esposa. 

 Claris: es la protagonista. hija de un párroco medio loco, ha quedado en la miseria por culoa del mismo, y vive en una casita de campo vendiendo remedios y cremas junto a su abuela. Cuando Perry le ofrece matrimonio le apunta con una pistola, pero más tarde encuentra en ésta proposición la salvación de sus hermanos. 

Athena: abuela paterna de Claris. Abandonó a su marido y su hijo cuando era joven, pero ahora ha vuelto a casa de su nieta sin un penique, alegando que sólo quiere cuidar de ella y de los gemelos. 

Ellis: dama de compañía de Athena. Es la única capaz de amedrentar a la anciana cuando se muestra arrogante, y disfruta cuidando de Claris y los pequeños.

OPINIÓN PERSONAL


Antes de nada quiero dar las gracias a la Editorial Titania por haberme concedido el placer de leer ésta maravillosa novela.

Éste libro forma parte de la saga de Los Mallory, pero no os puedo decir nada de ella porque no he leído ningún libro de la misma. Sin embargo, sí os puedo decir que aunque forme parte de una saga se puede leer de manera independiente y sin perderse en el camino.

Las propiedades de los Perrian fueron divididas entre dos hermanas. La mayor de ellas heredó el título y por consiguiente la mayoría de las propiedades, y la pequeña se quedó con Perrian MAnor, que debería pasar de generación en generación hasta que el dueño de la misma muriese sin descendencia en cuyo caso pasaría a manos de la familia de la hermana mayor.

Giles Perrian es el último descendiente poseedor de Perrian manor, y está en su lecho de muerte sin haber sido capaz de concebir hijo alguno. Es entonces cuando debe pasar su propiedad a la familia de Perry, pero lo hace de manera ruin: se la lega al pequeño de la familia, pero a cambio debe casarse con la hija de un párroco y vivir en ella al menos un mes al año.

Ésto no le hace ninguna gracia a Perry. En primer lugar porque la ira de su padre no conocerá límites, y en segundo lugar porque no tiene intención de casarse, y menos aún con una desconocida. Pero la moral le obliga a recuperar la propiedad para legársela a su hermano mayor cuando muera (porque tampoco puede cederla en vida), así que se acerca hasta Surrey para conocer a Claris y convertirla en su esposa.

En primer lugar quiero destacar el temperamento de Caris, que es fuerte, decidida y muy capaz de pegarle un tiro al primero que se interponga en su camino. Aunque es la hoja de un párroco medio loco y se ha quedado sin un penique tras su muerte, no se rinde e intenta por todos los medios sacar a sus hermanos menores, gemelos, adelante. Es por ello que accede tras mucho insistir en casarse, no porque Perry realmente le atraiga.

En cuanto a Perry... es un pelín prepotente y confiado. Creía que con su físico y su dinero iba a conseguir que Claris accediese a casarse con él, pero cuando descubre mediante un disparo de una pistola descargada que no va a ser así, recurre a sus amigos para que lo aconsejen sobre como proceder. Es un hombre justo, trabajador y cariñoso.

En ésta novela no se nos vende el amor a primera vista. Cuando se conocen, los protagonistas no se gustan, Claris odia a Perry y éste encuentra a la mujer insulsa y sin gracia. Sin embargo, es la convivencia en común lo que hace que los sentimientos afloren.

Me ha gustado mucho porque la autora se centra en el progreso de la relación paso a paso, no vaa del odio al amor en dos segundos. Al fin y al cabo el amor real es así, un proceso de conocimiento mutuo, ¿no?

En cuanto al final... he de decir que me esperaba un proceder de Perry diferente, y me ha encantado el camino que ha seguido para poder conseguir vivir con su nueva familia. Siempre que leo una novela de ésta editorial me siento plena y satisfecha, por lo que estoy deseando leer el siguiente libro.

Puntuación angelical...